Amnistía Interemocional




  

Ataques de corazón roto. Cerrado por reformas.


Pensaba que olvidarnos era más fácil que seguir agarrándonos a un clavo ardiendo, pero se me olvidó recordar que la soledad es demasiado perra como para dejar que dos personas se quieran a distancia.


Dos o tres o cuatro o cinco. Los que sean antes de darme cuenta de lo poco que sirven mis planes de propósitos. Propósitos de buenas intenciones. Propósitos huecos.


Proposición de matrimonio martirizado por la culpa de lo que nunca sucede.
Esperando eso.
Becket lo entendió.


Cuéntame las veces que quieres oler una piel femenina que no pueda ser la mía y te diré cuantos botes sin abrir llevan tu nombre.


No doy explicaciones. No das señales.

Explico mis actos. Extingues tus dudas.

Comentarios